El 7 de noviembre por la tarde sonaba mi teléfono. ¡Sorpresa! ¡Mariano Parellada al habla!
Después de hablar un buen rato con Mariano me llevé la sensación de que se llegan a decir muchas tonterías sobre Turismoto y su persona. Afable, claro, enfadado, disgustado y molesto me explicaba los motivos por los que Pingüinos 2015 pasará a la historia por NO celebrarse. Y es que como él me decía y puedo llegar a entender, no se pueden hacer las cosas a última hora cuando se trata de mover a más de 30.000 personas, y hasta ahí puedo leer.
Mariano Parellada me pidió que no escribiera nada en relación a los por menores de nuestra conversación, algo que respeté y respetaré, y que me esperara hasta que Turismoto hiciera el comunicado oficial, el mismo que me acaba de llegar hace unos minutos por correo.
¡Definitivamente, Pingüinos 2015 queda SUSPENDIDA!
Una vez más se carga contra los grupos minoritarios, de la oposicion o los ecologistas, aludiendo, que por culpa de ellos no se hará la concentración. Hay momentos en la vida en que hay que posicionarse.
No me repetiré mucho más sobre tales menesteres pues si bien es cierto que esos grupos fueron los que denunciaron el emplazamiento de la concentración, más cierto es, que la justicia les dió la razón, por contra, a nadie se le escapa que el Ayuntamiento de Valladolid ha tenido mucho, pero que mucho, pero que mucho tiempo para buscar y acondicionar un nuevo emplazamiento.
Los aficionados son los que al fin y al cabo saldremos perjudicados de todo este despropósito, perdiéndonos, una de las mejores concentraciones de Europa. Turismoto y los comerciantes de Valladolid también perderan su parte, y yo, solo señalaría hacia un lado... AdV.
Y a pocas palabras buen entendedor basta.
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